El estrés es una respuesta natural que todos tenemos cuando enfrentamos algo que altera nuestro equilibrio emocional, esto puede ser un ambiente complicado o un malestar físico. Todas las personas necesitan de esta reacción para poder afrontar momentos difíciles, ya que nos pone en un estado de alerta, sin embargo, si se prolonga demasiado puede llegar a ser negativo; en este informativo podrás conocer algunas recomendaciones para manejarlo.

Estar bajo altos niveles de estrés durante un período considerable de tiempo puede tener efectos perjudiciales a nivel emocional, físico y psicológico. Algunos de los efectos que pueden ser:

  • Dificultad para pensar y tomar decisiones
  • Insomnio o tener sueño todo el día
  • Desánimo
  • Falta de apetito o exceso de apetito
  • Conductas adictivas como consumir bebidas alcohólicas o fumar
  • Mal humor
  • Conflictos con seres queridos
  • Dolores de cabeza
  • Malestar estomacal

Formas de manejar el estrés

Cuando consideres que te encuentras bajo mucho estrés al punto de sentir que te sobrepasa, el primer paso es reconocerlo y ser consciente de que tienes control sobre tus pensamientos y emociones. Luego de esto, podrás implementar algunas recomendaciones como:

  1. Moverte y activarte físicamente es fundamental para manejar el estrés; intenta mantener un equilibrio, 10 minutos de ejercicio 3 veces al día puede tener resultados notables en tu estado de ánimo y sensación de bienestar.
  2. Mantener una buena postura y sentarse correctamente te permitirá un mejor paso de oxígeno y, por ende, más eficiencia en tus actividades laborales o escolares.
  3. Tener una dieta saludable. Evita los alimentos con gran cantidad de azúcar y grasas y trata de sustituirlos por verduras, frutas y granos.
  4. Dormir lo necesario. Descansa lo suficiente durante la noche, lo recomendable es dormir al menos 6 horas.
  5. Practicar acupresión. Toma el pulgar y el índice de tu mano, y presione el punto débil de la palma entre los mismos dedos de la otra mano. Luego, cuenta hasta tres mientras presionas.
  6. Realizar actividades que requieran un alto nivel de concentración. Intenta utilizar tu tiempo libre en pasatiempo que te llevan a prestar mucha atención como coser o armar un rompecabezas.
  7. Practicar ejercicios de respiración. Es importante implementar la respiración profunda. Esto te ayudará a pensar y actuar de forma más constructiva. Intenta hacer entre 12 y 18 respiraciones profundas por minuto hasta lograrlo.
  8. Tener un entorno laboral saludable. Procura generar un espacio de trabajo en el que te sientas cómodo y motivado.
  9. Conservar el tiempo con seres queridos. Pasar tiempo con familiares y amigos puede ayudarte a sentirse mejor y olvidarte del estrés. Confiar tus problemas a un amigo también puede ayudarte a tener una nueva respectiva para solucionarlos.
  10. Escuchar música. Poner tu música favorita puede ayudarte a reducir las respuestas frente al estrés, tales como la alta presión sanguínea y el ritmo cardíaco elevado.
  11. Tener plantas en tu espacio de trabajo. Las personas que trabajan cerca de plantas reaccionan un 12% más rápido y se muestra menos estresada, de acuerdo con investigaciones en cuanto al cambio de la presión sanguínea.
  12. Reconocer las cosas que no puedes cambiar. Es importante aceptar que hay cosas que son difíciles o molestas, pero que no están bajo nuestro control, por lo que es mejor centrarse en lo que nos puede hacer sentir mejor en esos momentos.
  13. Evitar las situaciones estresantes. Procurar alejarte de la fuente del estrés.
  14. Cambiar tu perspectiva. Intente desarrollar una actitud optimista ante los retos, reemplazando pensamientos negativos por positivos.
  15. Aprende formas de relajarse. Practicar técnicas de relajación es una gran manera de lidiar con el estrés diario. Las técnicas de relajación te ayudarán a disminuir el ritmo cardíaco y la presión sanguínea. Puedes intentar desde respiraciones profundas y meditación hasta yoga y taichí.
  16. Aprender a decir ‘’no’’. Si tu carga de trabajo o la cantidad de tareas pendientes es excesiva, es importante que aprendas a establecer límites.

Identificar los momentos de estrés es un buen comienzo para implementar estas prácticas y sentirte mejor. Recuerda que ningún factor externo es más importante que tu salud mental.

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Fuentes:

Medline Plus: Manejo del estrés

Organización Internacional para las Migraciones (OIM): Manual de gestión del estrés