En el siguiente informativo encontrarás contenido relacionado con el día internacional de la paz y la importancia que tiene para la sociedad.

Conoce sobre la importancia del día internacional de la paz y cómo ser un constructor de paz.

Cada año, el 21 de septiembre, se celebra el Día Internacional de la Paz en todo el mundo. La Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) ha declarado esta fecha como el día dedicado al fortalecimiento de los ideales de paz.

Sin embargo, para lograr la paz se debe de tomar en cuenta un conjunto de factores que no solo conlleva la violencia y las armas. Requiere la construcción de sociedades en las que todos/as sientan que puedan desarrollarse. Implica la creación de un contexto en el que todas las personas sean tratadas con igualdad, independientemente de su raza, sexo, diversidad sexual, edad, entre otras.

Por ello, en este texto te brindamos información sobre antecedentes del día internacional de la paz y cómo podemos ser constructores de paz que ayude a fortalecer el contexto y a mitigar la desigualdad.

Antecedentes del día internacional de la paz:

En el año 1981 la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) estableció el 21 de septiembre como el Día Internacional de la Paz, una fecha dedicada a conmemorar los ideales de la paz de cada pueblo y cada nación, con especial énfasis en el desarrollo social y económico de los pueblos, en diversas áreas: pobreza, hambre, salud, educación, cambio climático, igualdad de género, agua, saneamiento, electricidad, medioambiente y justicia social.

Posteriormente, en el año 2001, la asamblea general decidió designar este día internacional como Jornada de no violencia y alto al fuego.

La celebración de este día se sustenta en el artículo 3 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, el cual indica que: "Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona", sentando las bases para la libertad, la justicia y la paz en el mundo.

Es importante mencionar que la paz la hace la sociedad y todas las personas que la habitan y no hay un manual que se deba seguir para construirla. Sin embargo, hay una serie de actitudes y acciones que de forma cotidiana los y las ciudadanas podemos implementar con el propósito de mejorar la paz.

Recomendaciones para ser un ciudadano constructor de paz:

Estas son algunas prácticas con las que puedes aportar desde tus acciones diarias a generar las transformaciones que la ciudad y el país necesitan para ser una sociedad más pacífica.

  • Respete su vida y la vida en todos/as sus formas y rechace las diferentes expresiones de violencia, que puedan hacerle daño a usted o a otras personas.

  • Transforme sus pensamientos. Tome en cuenta que, a la hora de interactuar con otros, tenga presente que la percepción positiva que tiene de sí mismo puede extenderla a quienes lo rodean.

  • Transforme el lenguaje. Reemplace las palabras que contribuyen al odio y la venganza por expresiones de esperanza y otros pensamientos positivos.

  • Reconozca por qué existen y para qué sirven las normas. El concientizar la información ayudará a que pueda entender de mejor manera la importancia de respetar las normas para vivir en comunidad.

  • Establezca con su familia, compañeros de estudio, trabajo y amigos acuerdos claros, libres, voluntarios y sinceros, que le permitan fortalecer sus lazos y evitar posibles conflictos. En caso de incumplir un compromiso, repárelo a través de algún gesto que permita restablecer la confianza y promueva la reconciliación.

  • Ante una situación de conflicto, propóngase conocer y entender las motivaciones e intereses del otro. Mediante el diálogo, busque alternativas creativas para transformarla en una oportunidad de aprendizaje.

  • Practique la empatía. Sea generoso, considerado y cuide del otro, preocupándose por su bienestar.

  • Reconozca y respete la diversidad en todas sus dimensiones.

  • Sea tolerante ante las diferencias. No trate de imponer sus puntos de vista, costumbres o proyectos desconociendo las identidades, intereses y visiones del mundo de los demás.

  • Participe activamente en distintos escenarios comunitarios y sociales. La participación es el camino por el cual todos los ciudadanos podemos incidir en nuestro entorno y generar procesos colectivos en busca del bien común, que fomenten la confianza y la cooperación.

Recuerda que la transformación positiva contribuye a que la ciudad y el país sea una sociedad más pacífica, sin olvidar que este es un trabajo de todos y todas.

Nota: si deseas recibir apoyo psicosocial u orientación sobre diferentes opciones de servicios en el país identificados en Cuéntanos, puedes escribirnos por WhatsApp, Facebook Messenger o Instagram, todos los días de 7:30 a.m. a 11:00 p.m.

Fuentes:

Naciones Unidas: Día Internacional de la Paz

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